Hoy más que nunca la sociedad civil y el país en su conjunto, incluida la clase política, deberían agradecer el trabajo de la prensa, sobre todo del periodismo de investigación, pues realiza una labor fundamental para la democracia peruana y, por ende, para la estabilidad de la gobernabilidad. En ese talante, deberíamos apoyar todos a esa prensa y no atacarla o amenazarla como lo están haciendo algunos políticos tras el suicidio de Alan García.