La derecha bruta y achorada peruana es macartista. Esto acaba de reflejarse con las piezas de arte popular ayacuchano a las que se les acusó de ser muestras de apología del terrorismo. El Ministerio de Cultura debe tener reflejos más rápidos y actuar de inmediato cuando se trata de procesos de discriminación y atentado contra la cultura peruana.