Kenji Fujimori está perturbando a la bancada de Fuerza Popular. Su presencia y reparación deben asumirse como un hecho político, más allá de las circunstancias familiares que lo rodean por el conflicto que tiene con su hermana Keiko. Él quiere y va a jugar un rol político. Una vez que su padre, Alberto Fujimori, salga de prisión veremos a Kenji catapultado y redefiniendo una estrategia electoral.


Que no nos sorprenda verlo apadrinar candidaturas para las elecciones municipales y regionales del 2018 por fuera de Fuerza Popular. Tampoco nos sorprendamos si lo vemos preparando una campaña presidencial con miras al 2021. No estamos, entonces, ante una pantomima (como algunos todavían creen) para confundir al electorado. No, son dos fujimorismos los que están en pugna. No olvidemos tampoco que una vez libre, Alberto Fujimori no va a regar plantas o cuidar a sus nietos, sino va a hacer política a favor de su menor hijo. 

[Foto de portada: Andina]