Los únicos que ganarían si el statu quo político no se renueva y no ofrece nuevas alternativas serían quienes pretenden patear el tablero y cambiar la constitución. Por ello, tanto el Ejecutivo como el Legislativo debe responder a la exigencia de la ciudadanía. Para que la sociedad se reenganche con la democracia, es necesario hacer cambios importantes, significativos, lo que pasa por que el gobierno haga  suya la reforma política propuesta por la Comisión Tuesta.